Al igual que hemos hecho en los años anteriores, un martes de cada mes queremos acercarnos a otro deporte, conocer de la mano de algún club las primeras nociones de las muchas modalidades deportivas que se practican en las pistas, los campos y los terrenos de juego.
Así, este martes, 26 de noviembre, el Valladolid Club de Esgrima, uno de los clubes de elite de la capital vallisoletana, nos hizo partícipes de un deporte que viene de la Edad Media. Una modalidad deportiva que es olímpica desde los primeros Juegos y que tiene como protagonista a tres armas, la espada, el florete y el sable.
Nuestros jugadores de los equipos de Inclusport Azul pudieron conocer de primera mano, gracias a la presencia en nuestra pista de Jesuitinas de la espadista del Valladolid Club de Esgrima Naiara Moreno, una de las 20 mejores tiradoras de España, lo que es marchar (desplazamiento hacia delante), romper (desplazamiento hacia atrás), un fondo y tirar. Nos costó entrar en materia, pero luego nos aventuramos, con careta incluida, a probarlo.
Este entrenamiento se enmarca dentro de los que venimos haciendo mensualmente desde el arranque de nuestra andadura para conocer otros deportes que no son el balonmano. Así, el primer año pasaron por nuestras pistas las primeras plantillas del BSR Fundación Grupo Norte, para conocer el baloncesto en silla de ruedas; del Aula Alimentos de Valladolid, para aumentar el nivel del balonmano; del Carramimbre CBC Valladolid, con el que aprendimos baloncesto; y del Recoletas Atlético Valladolid, en el que mezclamos balonmano y balonmano adaptado. Estos entrenamientos conjuntos continuaron la pasada temporada, compartiendo cancha con el Valladolid Club Voleibol, que nos enseñó su deporte; el Club Patinaje en Línea Valladolid, que nos mostró el hockey en línea; los cadetes del HandVall Valladolid o del Aula Alimentos de Valladolid; el Club Deportivo Bádminton Laguna, para acercarnos a su modalidad; de nuevo el Recoletas Atlético Valladolid, el Kinball Valladolid; la Fundación Eusebio Sacristán, para saber algo más de fútbol; y el Club Rugby El Salvador, con sus equipos masculino y femenino, y el de Touch, del que aprendimos el deporte del oval.